Las fachadas han pasado a ser un elemento muy importante a nivel estético además de garantizar calidad de vida a los edificios y viviendas actuales, en los que el bienestar de las personas pasa a un primer plano
Las fachadas se han establecido a lo largo de los últimos años en uno de los elementos constructivos más importantes de la nueva arquitectura. Gracias a los últimos avances tecnológicos, los materiales para revestir las fachadas de casas modernas son capaces de ofrecer ciertas ventajas técnicas que antes eran impensables. Entre ellos destaca especialmente el amplio catálogo de soluciones para fachadas de casas modernas de Grespania y Coverlam, que pone a disposición de arquitectos y profesionales de la construcción opciones muy interesantes, entre las que destacan especialmente las fachadas ventiladas, cada vez más habituales por sus innumerables ventajas técnicas respecto a otras opciones constructivas.
Hoy en día, a la hora de abordar diseños de fachadas de casas modernas, tanto en rehabilitaciones y remodelaciones como en edificios de nueva construcción, las prestaciones técnicas que estas ofrezcan cobran una mayor relevancia. Cualidades térmicas, acústicas, estéticas, funcionales y constructivas son requisito indispensable para los profesionales de la construcción, siempre a la búsqueda del material más completo del mercado y que mejor se adecúe a la tipología de la fachada proyectada.
FACHADA LIGERA
Este tipo de fachada se ancla a la estructura resistente del edificio, pero no forma parte de esta, construyéndose de forma continua por delante de ella. Los materiales más utilizados para su revestimiento son el vidrio y el metal. En comparación con otro tipo de fachadas, las ligeras proporcionan un menor aislamiento térmico y acústico, siendo además una de las opciones más costosas en cuanto a mantenimiento. Habituales de oficinas o estaciones de tren, no suelen ser habituales en el revestimiento de fachadas para casas modernas.
FACHADA PESADA
La característica principal de esta clase de fachadas es la utilización de materiales constructivos tradicionales como ladrillo, enfoscados, piedra, etc. Dentro de las fachadas pesadas se encuentran diferentes categorías que varían en función del aislamiento térmico buscado, entre otras funcionalidades propias de cada una de ellas.
Una fachada prefabricada está formada por módulos prefabricados que se ensamblan en obra. Fáciles y rápidas de instalar (aunque muy limitadas a nivel estético), este tipo de fachadas son más habituales en naves o centros comerciales.
Como su propio nombre indica, son fachadas muy comunes en el parque de viviendas desde hace varias décadas. Aunque actualmente las nuevas construcciones y rehabilitaciones de fachadas de casas modernas se decantan por otras tipologías que ofrecen un plus en cuanto a prestaciones técnicas – como las fachadas ventiladas -, la tradicional sigue siendo una de las opciones predilectas de los profesionales de la arquitectura. Muy práctica, la fachada tradicional es fácil de construir e instalar, además de ofrecer infinidad de opciones estéticas en sus acabados, sobre todo si el revestimiento elegido es cerámico.
Sin duda la gran favorita de los proyectos actuales. Los innumerables beneficios que ofrece esta variedad de fachadas para casas modernas se basa en su característica cámara de aire, la cual permite establecer una separación física entre la parte exterior de la fachada y el muro interior del edificio. Dicha separación crea una cámara abierta que permite la renovación del aire contenido entre el cerramiento y la piel cerámica exterior; una solución constructiva con innumerables ventajas técnicas y estéticas.
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